
Somos una sola familia donde cada miembro tiene derecho a la igualdad, sin embargo esto no es real, en el mundo no existe una distribución de la riqueza equitativa, la brecha cada día es más amplia y la pobreza aumenta considerablemente. Los hogares millonarios representan el 0,9 % de todos los hogares en el mundo y poseen el 39 % de la riqueza mundial, su crecimiento fue de un 8% en el año 2010. El desarrollo económico es limitado, el 57% del PIB de América Latina y el Caribe se genera en sólo el 9% del territorio.[2] Esta concentración de la riqueza es solo una de las características que evidencia la desigualdad mundial y principalmente en Latinoamérica.
En Costa Rica las comunidades donde se vive en mayor pobreza son las zonas más alejadas de los centros urbanos, con grandes limitaciones a centros educativos, herramienta que conocemos ayuda a combatir la pobreza. En el mundo 1.400 millones de personas viven en pobreza extrema, de estos el 70% viven en zonas rurales de países en desarrollo. [3] Las familias de escasos recursos no solo se las ingenian para solventar necesidades básicas como la alimentación, muchas veces lidian con el rechazo de la sociedad condenándolos a seguir en su condición. Las oportunidades de inserción a la sociedad inicia con fácil acceso a la educación, pero no solo básica sino secundaria, técnica y por qué no universitaria, es la herramienta y si no la única de erradicar la pobreza.
Durante la Cumbre del Milenio 191 países aprobaron la declaración del milenio comprometiéndose a centrar su interés y su esfuerzo en ocho objetivos de desarrollo del milenio. Costa Rica fue uno de los países firmantes de este compromiso mundial a alcanzar en el 2015, sin embargo no es un asunto de firmas sino de compromiso de toda la sociedad.
Como combatir la pobreza y las hambrunas de países del continente Africano por ejemplo. Gobiernos llenos de corrupción que lideran solo por el bienestar de unos pocos y donde las grandes potencias económicas no vuelcan sus ojos porque no identifican grandes beneficios traducidos a dinero. En el mundo las personas que más tienen no solo tienen que pensar en los menos desafortunados, tienen que actuar.
Cada país debería tener un código de protección y justicia social y ambiental, ser socialmente responsables de su actuar, evitar los riesgos de incurrir en desastres a la naturaleza, tienen que proteger la biodiversidad, el impacto que se ocasiona con la cantidad de basura que se produce y que no se sabe tratar, todo esto afecta la sostenibilidad de los recursos, principalmente uno, el agua, fuente vital para todo ser vivo.
Del agua depende la existencia de cada ser vivo, tanto las plantas, animales como las personas dependemos de este recurso, no establecer mecanismos de protección pone en riesgo hasta los alimentos que consumimos cada día.
Los cuatro principios mencionados en La Carta de la Tierra, para una forma de vida sostenible:
· Respeto y cuidado de la comunidad de la vida.
· Integridad ecológica
· Justicia Social y Económica.
· Democracia, no violencia y paz.
Resumen lo que el mundo tiene que cambiar y hacer, deberían adoptarse urgentemente a nivel mundial, no podemos olvidarnos que si destruimos nuestro hogar no hay otra mundo donde nos podamos mudar, hoy, ya es que tenemos que decidir cambiar. Las tareas empiezan en cada hogar, escuela, empresa… todos tenemos un granito de arena que aportar. Si cada ser humano se concientizara y no pensara que por sí solo no genera cambios, nos equivocamos, ese aporte cuenta y una gota hace un hoyo.
Coocique, como empresa financiera con sentido social hace un pequeñísimo pero muy valioso aporte al mundo. Cada día se promueve la justicia social y económica, se preocupa de la protección del medio ambiente es por esto que apoya campañas de reciclaje, promueve la separación y reciclaje de desechos en la empresa, siembras de árboles en las cuentas de ríos y acuíferos.
La Cooperativa además de los programas de ayuda a la sociedad, promueve recursos económicos (créditos) para actividades dirigidas a la protección del medio ambiente, todas estas actividades se traducen en un pequeño aporte en el desarrollo de una mejor sociedad y no solo esto brinda apoyo a las micro, pequeñas y medianas empresas.
Estas pymes con acceso a recursos económicos ofrecen empleos que muchas veces detrás de estos hay madres solteras, familias de escasos recursos, jóvenes con deseos de superación, que gracias a esto pueden acceder a la educación y luchar por mejores condiciones de vida.
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